Ads Header

viernes, 15 de marzo de 2019


LA SEÑORA P... RECUERDA

La señora P. confronta su imagen frente al espejo... es inevitable su cuerpo se ha expandido y su rostro ha adquirido nuevas arrugas en su cartografía.. la vida pasa en un suspiro se dice, pero lo importante es seguir viviendo.
Sabe que su vida no ha sido fácil pero sí sumamente intensa y ello la congratula. Sobre todo cuando se transfigura en "una cascada de palabras"... cuando se pone a "en/cantar la palabra"... sin la escritura ahora estaría peor que una rana aplastada.
Se sabe ávida lectora; la lectura acompaña hasta al alma más solitaria... ha tenido muchos y muchas escritores y escritoras de cabecera.. pero, sin duda Camus la acompañado durante años sobre todo "El extranjero", más de una vez se ha sentido alma gemela de Mersuault...
Ahora es Paul Auster su mejor compañero de viaje, por ese azar que entrecruza cada uno de sus libros- lo ha leído en un poco más de 90%.
Paul el trotamundos a través de la metaliteratura...
Pero, hoy la señora P. no quiere ponerse demasiado intelectual, más bien quiere aterrizar en el PLANETA TIERRA y ya no surcar por esa "nubosidad variable" de Carmenchu, no le ha funcionado la ecuación de su hipersensibilidad con su fantasía desbordada, más de una ocasión ha estado al borde de la locura... hoy por fortuna con poco más de seis décadas terrestres, ya no es una desbocada Amazona de las mil calles y avenidas, sino una apacible Dama de Agua...
Irremediablemente es una adicta a la tristeza, pero ha aprendido a gozar del revoloteo de una mariposa.
Tras cinco años de un "juego de serpientes y escaleras", la luz ha vuelto a presidir a sus días y sus horas.. y ello la hace muy feliz, así como esa gran familia de amig@s que ha recogido a lo largo del camino.. podría decir con Nervo "Vida nada me debes, vida estamos en paz" o con Violeta "Gracias a la vida que me ha dado tanto..."
Es una señora que aún conserva alma de adolescente, está dispuesta a emprender nuevas aventuras... ha superado su "síndrome de romántica incurable", pero aún se deja guíar por Pascal "el corazón tiene sus razones que la misma razón desconoce"...
Su hijo lejos pero  cerca, ella en su Aquí y ahora con una brújula que ya no se desorbita.. La señora P. al fin a conseguido el equilibrio de su Yin y Yang... se deja mecer por una suave saudade... y permite que sus ángeles cósmicos la cuiden.




1 comentarios:

Michaek K. Schuessler dijo...

¡Hermosa reflexión, querida y apacible Perla, la dama del agua!

Publicar un comentario