CARMEN ALARDÍN :LA PALABRA LUMINOSA

Ella fue oriunda de Tamaulipas, pero hija adoptiva de Monterrey. Su nombre Carmen Alardín, (1933-2014) una vida dedicada a la poesía, su primer libro "El canto frágil" data de 1950. Perteneció a la generación de Jorge Cantú de la Garza y de Isabel Fraire.
Poeta prolífica, dueña de una palabra luminosa, donde entreteje lo clásico y lo moderno. En 1984 "La violencia del otoño" la hizo acreedora al Premio Xavier Villaurrutia. El año pasado fue editado su poemario "Para que las estrellas la recuerden".
Este año la Universidad de Nuevo León le publica en forma póstuma "La caída del ángel".
Un libro con poemas urbanos, claroscuros de una ciudad que se ama y se odia: "Para ti, mi ciudad debió ser triste/ renunciar a ser lago en la memoria/ para ser sólo bloque de concreto/ que se hunde sin rabia y sin motivo."
Un ritmo acompasado preside la pluma de Carmen, el tiempo siempre es insuficiente para elevar el canto, en una ciudad vampírica, ojerosa como la viera López Velarde.
"La caída del ángel" implica una lectura gozosa de una voz pura que entre el asfalto y las construcciones altas busca su lugar de acomodo.