"SEÑOR LAZHAR": PEDAGOGÍA EN 35 MILÍMETROS

Es la primera vez que veo una película del realizador canadiense Philippe Falardeau, y quedé gratamente sorprendida, más allá de que estuvo nominada para los Oscares como mejor película de habla no inglesa, o el premio al mejor guión en la SEMINCI del año pasado "El señor Lazhar" (2011), es un filme entrañable, que lleva al espectador(a) por los caminos del dolor profundo y la sanación.
Un refugiado político emigra de Argelia a Canadá y llega como profesor suplente a una secundaria de Montreal. Él es Bachir Lazhar (maravillosa actuación de Mohamed Fellag).
Su estancia no será fácil, él llega a suplir a una maestra que recientemente se ha suicidado, dañando la psique de sus alumnos... y hasta aquí este breve resumen de la trama.. que creo motivador para invitarlos a ver esta pequeña obra maestra: pedagogía en 35 milímetros, que nos permite ver lo inestable que son los adolescentes hoy en día, el cómo determinados eventos nos  marcan de por vida, y el cómo detrás de cada tragedia, siempre subyace un rayo de esperanza.
La puesta en escena de Falardeau es sencilla e intimista, se agradece que nunca roce un desbocado melodrama y su mano firme en la dirección de actores, donde además del protagónico, destacan los jóvenes intérpretes Sophie Nelisse como Alice y Emilien Neron como el rebelde Simón.

Inevitablemente esta cinta nos remite a "La clase" de Laurent Cantent, pero con la diferencia que ésta era con toques más documentales, en cambio "El señor Lazhar" que adapta la obra teatral homónima de Eveline de la Cherliene, y que el año pasamos, la vimos con la actuación de Boris Schoemann en La Capilla, tiene la virtud de hacer del monólogo original, una película de intensidades, un regalo para el espíritu deseoso de conciliación.