"LA VIDA MISMA": UN TRIBUTO AMOROSO A ROGER EBERT

El realizador Steve James ("Hoop Dreams") se dió a la tarea de realizar un documental en torno al brillante crítico de cine Roger Ebert (1942-2013), cuatro meses antes que éste muriera tras batallar por poco de más de siete años con un cáncer feroz que lo dejó sin habla, con el rostro deforme e inmovilizado en una silla rueda, pero sin perder sus ganas de vivir hasta que ya no pudo.
El resultado es "La vida misma" ("Life itself", Estados Unidos, 2014), que actualmente se exhibe en Cineteca nacional, estamos ante un tributo amoroso de un hombre que amó al cine y al cual le consagró la mayor parte de su vida. A pesar de que su formato cinematográfico es convencional, el resultado es muy emotivo y muy valioso el material de archivo y los testimonios entre los que destacan los de los cineastas Martin Scorsese- a quien Ebert lo consideró el Fellini de Estados Unidos y el de Werner Herzog- quien le dedicó un documental que se ubica en la Antártida. Sin olvidar el de algunos críticos norteamericanos como Richard Corliss, A. O. Scott y Jonathan Rosenbaum.
Ebert el único crítico de cine premiado con el Pulitzer en 1975, tuvo como filme favorito "El ciudadano Kane" y se encargó por décadas de analizar sobre todo el cine proveniente de la industria con especial sensibilidad. Cuando estuvo sano gozó de sus ideas al Festival de Cannes y de sus participaciones televisivas con el también crítico Gene Siskel, a quien lo unía una fuerte relación amor-odio.
En este documental a través de recuerdos y un dejo de nostalgia, se muestra como el séptimo arte se puede convertir en eje central de una vida, porque ya muy enfermo Roger Ebert continúo escribiendo de cine en su blog.
Capítulo aparte merece la relación su esposa, la afroamericana Chaz quien abnegadamente lo cuidó hasta el final.
"La vida misma" es un documental obligatorio para quienes amamos al arte cinemático y sabemos como Francois Truffaut que "el cine es mejor que la vida".